November 25th,

La misma frase puede tener significados distintos dependiendo de su entonación.

¿Me quieres?

Me quieres.

Y es que tengo miedo. Miedo a que te vuelvas a ir sin decir adiós, miedo a leer un mensaje tuyo diciéndome que se acabó, miedo a que desaparezcas y no pueda hacer nada al respecto.

Tengo miedo de que la cosas no vuelvan a ser como antes. Y es que, en realidad, no lo son.

Todavía recuerdo cuando nos conocimos, cuando nos gustamos, cuando nos dijimos que nos queríamos. Lo recuerdo todo perfectamente. Recuerdo las peleas, los enfados, todos aquellos finales que parecían serlo y no lo fueron. Y fuimos cambiando. Las pequeñas cosas, los detalles, las palabras, los actos; todo nos cambió de una forma u otra.

No soy aquella chica tímida e inocente que un día conociste, y tú tampoco eres ese chico despreocupado y ligón que hizo que me enamorara.

Los golpes cambian a las personas y las cicatrizes siguen ahí para recordarnos que no somos los mismos y que no volveremos a serlo.

Pero mientras me quieras, a pesar de todos los cambios, peleas, celos, desconfianzas, caprichos..., a pesar de todo eso, yo te sigo queriendo.

Quiero a la persona que eres hoy, y estoy dispuesta a querer a la persona que serás mañana.

Lo prometo.

2 comentarios: